Balcón del Guadalquivir
Córdoba ES
Juan Navarro Baldeweg
2004
Tipo
Espacio Público
Etiquetas
espacios públicos, para los peatones, en peligro de extinción, entorno del Guadalquivir, Spain ccc
Visitabilidad
Visitable
Descripción
Los proyectos de rehabilitación del molino de Martos y el Balcón del Guadalquivir en Córdoba constituyen una gran intervención urbana en la ciudad con poderoso efecto sobre la totalidad de ella, generando un amplio espacio para parque al borde del río y, por la rehabilitación del molino de Martos, la creación de un pequeño museo hidráulico que focalizará el espacio público sirviendo de enlace entre la ciudad y el parque.El balcón es a la vez un lugar que, a causa del giro del curso del río, permitirá el disfrute de las vistas del perfil de la ciudad antigua en la que aparece centrada la masa construida de la mezquita-catedral. El molino ayuda a comprender el anudamiento de la ciudad y el territorio, el medio construido y el ambiente natural cuya experiencia proporciona el ancho lecho del río.Formalmente el parque sigue las directrices de tres abanicos que se despliegan desde la Ermita de los Mártires y el molino de Martos hasta el estadio y el puente del Arenal. El primer abanico está centrado en la ermita, el segundo sirve para organizar entradas por medio de tres estanques conectados descendiendo hacia el río y que acercan la experiencia de la proximidad del agua hasta las cotas altas de la Avenida. Entre estas láminas de agua se disponen unos puentes sobre los planos inclinados por los que se vierte el agua de un estanque a otro. El tercer abanico se abre paso en una amplia zona verde arbolada, dirigiendo los caminos a los distintos puntos contacto.La rehabilitación del molino contempla la recuperación de los espacios que albergaban la maquinaria hidráulica en la gran sala abovedada restaurando cuidadosamente su arquitectura original. Sobre la zona de la sala abovedada se sitúa una sala de exposición del nuevo museo, una sala mirador desde la que se enmarcan vistas al río y a la ciudad. La arquitectura del molino queda así coronada por una pieza, realizada en elementos ligeros de aluminio, que apoyándose en la base del cuerpo principal del molino genera un espacio en el que se funden una geometría reticular y otra radial y en el que se organiza un recinto destinado a la contemplación secuencial y fragmentaria en un arco de ciento ochenta grados sobre el río y la ciudad. Este espacio como una rueda óptica está articulado y unido por dos ejes verticales en los prismas de cristal que conducen luz cenital sobre la sala abovedada de la planta baja. El molino y su nuevo mirador exponen de un modo real y metafórico la integración original del molino y el territorio, el nuevo parque y la ciudad antigua. ( Descripción aportada por los arquitectos )