© Jordi Surroca
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© Batlleiroig
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Camino de las Guixeres en Igualada

Barcelona ES
Batlleiroig
2018

Tipo

Espacio Público

Etiquetas

para los peatones, vida sana, Nueva Bauhaus Europea

Visitabilidad

Visitable

Descripción

Una recuperación paisajística sensible y atenta a las preexistencias y los valores del emplazamiento, basada en la tecnificación de las soluciones convencionales y con una óptima relación de recursos.La propuesta resuelve este tramo del Anillo Verde de Igualada aplicando soluciones tecnificadas que mejoran su accesibilidad, reducen su mantenimiento y desarrollan un sistema de drenaje capaz de aprovechar el agua de lluvia.La propuesta se enmarca dentro del proyecto global del Anillo Verde de Igualada, que busca generar un conjunto de itinerarios para peatones y bicicletas en forma de cinturón verde en el perímetro de la ciudad. Esta nueva infraestructura verde de movilidad sostenible quiere establecer un sistema de espacios libres perimetrales que funcionen en red, aptos para la realización de actividades de ocio respetuosas con el medio ambiente, adecuando y recuperando en buena medida, espacios actualmente degradados o infrautilizados.En este contexto, el camino de las minas de yeso, supone la adecuación de un tramo de 1,65 km, de los cuales se han ejecutado los primeros 800 metros.El espacio natural por donde transcurre el camino se encuentra situado en el perímetro norte de la ciudad de Igualada y presentaba un estado altamente degradado. Fue objeto de una intensa actividad extractiva del yeso existente en el subsuelo (Guixeres del Claret y del Pelfort). Posteriormente, una vez esta actividad cesó, la zona fue utilizada como estación de transferencia de residuos municipales. A finales de los años 70 este uso también cesa y el ámbito queda totalmente abandonado sin que se hiciese ningún tipo de actuación correctora o de recuperación.El proyecto parte de dos objetivos principales: uno de conectividad, adquiriendo la continuidad de este proyecto global de escala de ciudad (Anillo verde) y un segundo de recuperación paisajística y de biodiversidad, estableciendo los elementos necesarios para generar una nueva dinámica en el lugar que mejore progresivamente sus condiciones ambientales mediante el aprovechamiento de agua.La propuesta aprovecha la plataforma existente para configurar este nuevo tramo de la anilla verde. Su trazado se plantea mayoritariamente por la vertiente exterior con la intención de potenciar las vistas sobre la ciudad de Igualada.La geometría con la que se formaliza permite que el nuevo camino se adapte de manera óptima a las irregularidades de esta plataforma y al mismo tiempo pueda acercarse a la vegetación y las sombras existentes o bien potenciar unas determinadas visuales. Así mismo, el camino se complementa con una sucesión de pequeñas zonas de estancia colocadas estratégicamente en los lugares de mayor privilegio. Este tramo del recorrido culmina en un mirador final que vuela en forma de voladizo sobre la montaña ofreciendo una visual sobre la comarca de la Anoia y la montaña de Montserrat.La innovación de la propuesta radica en la tecnificación de soluciones convencionales para la construcción de caminos, para así adquirir unas mayores prestaciones a nivel de accesibilidad, visibilidad, durabilidad y renaturalización del entorno, con una óptima relación de gastos, y una máxima eficiencia de la huella ecológica.El sistema de drenaje propuesto mediante cunetas y zonas de retención permite la renaturalización del entorno con mayor vigor gracias al aprovechamiento de las aguas de escorrentía. La franja inclusiva, en forma de cinta de hormigón de 1.2m, habilita la accesibilidad al recorrido para determinados grupos de personas. Al mismo tiempo, el canto de esta banda pavimentada permite ser seguido por los invidentes hasta el final del recorrido.Habiendo resuelto los temas de agua y la inclusividad, la parte firme del camino puede ser granular. La proporción resultante entre las dos bandas permite que el camino continúe teniendo un carácter blando, idóneo en el contexto donde se sitúa. Así mismo, supone un uso muy eficiente los materiales.El agua es un recurso preciado y se ha de gestionar con inteligencia. Bajo este principio, la propuesta configura un nuevo sistema de drenaje que aparte de controlar las aguas superficiales, intenta aprovechar el máximo con tal de infiltrarla en el mismo terreno, generando nuevas zonas húmedas.(Descripción aportada por los arquitectos)