Mezquita Sancaklar

Descripción

El edificio se diseñó atendiendo a los deseos de la familia Sancaklar, que quería construir una mezquita en un solar con vistas al lago Büyükçekmece, en un barrio repleto de urbanizaciones privadas. La problemática principal era la confrontación con el esquema clásico de las mezquitas otomanas, que resultaba anacrónico con las técnicas de construcción actuales.Apoyándose en la premisa de que una mezquita no había de tener una forma predeterminada y de que cualquier lugar limpio podía ser una sala de oración, el proyecto se centró en la «esencia» del espacio religioso, alejándose de los debates arquitectónicos sobre la forma y poniendo el disfrute físico y emocional en un primer plano. El objetivo del diseño era representar las formas más puras de la luz y la materia, al igual que un mundo interior primario, libre de toda carga cultural. Se buscaba que el edificio desapareciera en la pendiente del terreno, que se anclara al suelo como si siempre hubiera estado allí, deshaciéndose de todo compromiso temporal y cultural.El proyecto está situado en un paisaje de praderas, separado de las comunidades vecinas por una calle muy transitada. Los únicos elementos visibles de la mezquita son su patio rodeado de muros horizontales y una masa prismática vertical de piedra (minarete) con una inscripción que señala que se trata de un lugar para rezar. Bajando la colina, y siguiendo la pendiente natural del terreno, unos escalones conducen a la entrada, situada en el patio inferior. La casa de té, el espacio comunal y la biblioteca, al otro lado de la mezquita, enriquecen la función de reunión de este espacio abierto. La sala de oración, a la que se llega directamente, es un espacio sencillo similar a una cueva, un lugar dramático e inspirador para rezar y estar a solas con Dios. Su interior es sencillo, con sus materiales expuestos tal cual, sin redundancias. Las paredes y el techo potencian la sensación de purificación y humildad. El espacio puede definirse como un espacio de meditación. El único ornamento es la luz del día que se filtra en el muro de la quibla, cambiante según la hora del día. Las hendiduras y fracturas a lo largo de este muro realzan la direccionalidad del espacio de oración. Un elemento muy especial lo constituye la letra و (wāw) representada en el muro negro reflectante que señala al infinito. Por primera vez en la arquitectura de una mezquita, las mujeres tienen la posibilidad de rezar en la misma fila que los hombres, en lugar de al fondo, como es lo habitual. Están situadas en una parte elevada y separada de la sala. El complejo cuenta con sala de abluciones, baños y la casa del imán, desde donde se puede acceder directamente a la sala.El edificio se funde por completo con la topografía de la zona, devolviendo su forma al terreno. Su carácter subterráneo y su cubierta verde proporcionan un aislamiento natural frente a las bajadas y subidas de temperatura. El paisajismo consiste principalmente en plantas silvestres que no necesitan mantenimiento y que se funden con la pradera. Todas estas características evitan el uso de energía y agua adicionales.(Descripción aportada por los arquitectos)