© Geraldine Bruneel
© Hisao Suzuki
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© Geraldine Bruneel
© Geraldine Bruneel
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© Geraldine Bruneel
courtesy of No.mad Arquitectos
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Plaza del Desierto en Baracaldo

Bilbao ES
No.mad Arquitectos
2002

Tipo

Espacio Público

Etiquetas

espacios públicos, Spain ccc

Visitabilidad

Visitable

Descripción

La respuesta es un proceso creativo que aúna la voluntad abstracta del pensamiento que acompaña la búsqueda de lo desconocido y la comprensión útil de los flecos del tejido histórico del lugar, primitivo, desgarrado y aparentemente caótico. Descubrimos una nada salpicada de hilachas hablando de luces nocturnas, aéreos tubos acerados, traviesas embreadas con raíles, grises carbones y charcos intermitentes entremezclados con arbustos salvajes. Es esa extraña amalgama y la memoria de la que habla la que intentamos que sobreviva en el nuevo paisaje como nexo entre  pasado y futuro, alejada de una imagen concreta pero cercana a una poderosa visión caleidoscópica. En un primer momento de confrontación física cuantificamos cada tipo de material que participa de ese caos, dotado sin embargo de una extraña cualidad atmosférica provocada por la presencia del orden oculto de su mezcla. Son esas relaciones de un material con otro, sus presencias cuantitativas comparadas, las que conservamos en el nuevo espacio mediante la distribución homogénea de cada material en el plano identificados con un código cromático abstracto. Esto se realiza con medidas de superficie que denominamos “salones urbanos” de dimensiones aproximadas a las de una sala de estar privada trasladadas al espacio público y que generan una rejilla de estancias matéricas que posibilitan diversas empatías entre los usuarios. Sin olvidar que estamos en un entorno de futura edificación con sombras variables, ruidos de tráfico, accesos de bomberos o visuales obligadas por el planeamiento establecemos una serie de normas de comportamiento de cada material frente a estas solicitaciones del tipo “si hay paso de camiones de bomberos no hay agua ni árboles” o “si hay un eje visual no habrá árboles” y así hasta completar una suficiencia de órdenes que permiten el correcto comportamiento del sistema. Realizada la tarea de desplazamientos de los materiales por sus incompatibilidades aparece una redistribución con mezclas nuevas como piedra y árboles, agua y piedra, hormigón y acero o madera y árboles que traducimos en realidades espaciales y constructivas. En aquellos espacios donde el acero aparece sin mezclar, la topografía de la plaza se particulariza elevándose con estructuras que definen estancias estáticas para descubrir el orden escondido del lugar y que garabatean la noche junto a constelaciones algorítmicas que guían a los dubitativos caminantes. La vegetación como parte del sistema adquiere una segunda especificidad con densidades, podas, alturas y colores diversos que enfatizan el grado de privacidad de cada salón urbano. El espacio público se ha autogenerado sin usos definidos a priori y conforma un tablero de múltiples oportunidades por descubrir, enamorados escondiéndose en salones de sombra, ancianos reunidos en torno a sus historias o niños con sus barcos en las láminas de agua admirando a los etéreos skaters. Quizás represente solo la complejidad del pensamiento al servicio de la vida.(Descripción aportada por los arquitectos)